miércoles, 25 de enero de 2012

Una Absurda Superstición 47 :

-¿Cómo entras?
-Me las se arreglar... Hay que espabilar para buscarse la vida.
-Dime cómo lo has hecho, no te voy a delatar ni me voy a enfadar.
-No me irá a decir que es usted la dueña...
-Pues sí y la que está enterrada aquí es mi abuela.
-¡Andá! Pero si yo me había pensado que tú..., usted, también era una curranta.
-¿Es que también hay abuelas trabajando aquí?
-Hombre claro. Si hace falta no hay más remedio.
-¿Y a qué se dedican ellas?
-A coger lo que pueden aprovechando los duelos.
-¿Quieres decir que roban?
-Bueno... Pues sí.
-¿Y también se refugian aquí?
-Sí, algunas veces.
-¿Vas a contarme de una vez como lo hacéis si está cerrado con llave?
-Pero abrir una cerradura de estas es una de las cosas más fáciles que hay, mujer, hasta los niños pequeños lo saben hacer.
-¿Vas al colegio?
-Fui hasta que aprendí las letras y algunas cuentas y luego lo dejé para ponerme a trabajar que era más importante.
-¿No te hubiera gustado estudiar un poco más?
-No lo he pensado. ¿Y usted que hace aquí si yo no la he visto nunca?
-¡Pues he venido a quedarme!
-¿A vivir aquí?
-A morirme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario