viernes, 5 de febrero de 2016
Dos Novelas Apacibles
Tan abundante de erudición como todos los libros de APR, que siempre tengo que
leerlos con ayuda enciclopédica; es una gran suerte los teléfonos inteligentes.
Es tranquilo, entretenido y se cierra con la estupenda sensación de haber aprendido
un par de cosas.
Este, de una autora que no conocía, es un poco más trepidante: en tiempo de guerra
y postguerra, de disimulos, de contenciones y de valentía y solidaridad.
También me ha enseñado cosas ignoradas.
Para mí, triste y muy melancólico.
Y ahora, dicho esto, vuelvo a lamentarme de no encontrar ese libro que me haga desear tenerlo a mano
una temporada porque me apetecerá releer algún párrafo de vez en cuando, en cualquier momento.
Pero no voy a perder la esperanza. Aún no.
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